Como fotógrafo profesional, sin duda las Fuentes del Marques en Caravaca de la Cruz es un paraje natural sumamente solicitado por mis parejas y también para la realizacion de los reportajes de fotos de comunión cuando estamos en plena campaña. Basta salir y dejarse llevar, soñar y pasear en sus exquisitos y numerosos rincones y su ambiente romántico, de ensueño e idílico que, con razón le han dado una fama justificada en toda la Región de Murcia. Es imposible dar un paseo por este lugar en cualquier época del año y no sentir que sufres un auténtico “viaje en el tiempo” con (literalmente) docenas de parejas haciendo sus reportajes de retrato allí venidos de distintos puntos de la provincia e incluso de lugares más remotos. Con tanto cancán suelto, y tanto romanticismo la imagen parece sacada de una escena de película de finales del siglo XIX…
En mi caso, practicamente todos los reportajes de niños de comunión, a petición de las familias los voy realizando allí, al cabo del año hago tantas sesiónes de fotos y tantos disparos allí que en muchas ocasiones he dejado de publicar esos reportajes de fotos para evitar la repetición. Cuando se trata de una pareja de novios yo hago al revés que los demás fotografos de bodas, voy esquivando este lugar y prefiero hacer las sesiones de fotos en cualquier otra localización que me ofrezca otras alternativas y salir de mi zona de confort.
Las Fuentes del Marqués están y son muy bonitas durante todo el año, pero particularmente si hay una estación donde estas alcanzan un grado superior de belleza y esplendor es en el otoño.
Así fué como Ruben y Liz no pudieron evitar quedar encantados y embelesados en esas fechas con el paisaje tan increible que durante esos meses del año nos brinda este mágico lugar y me solicitaron realizar su sesión de fotos preboda allí. Personalmente fué un reto muy importante que se me presentaba. Por ser de la zona estaba agotado, desde una perspectiva profesional, de ver y hacer miles de fotografías de este lugar, de pasear y ver muchísimas parejas a lo largo del año fotografiarse aquí. Pero yo quería ir un punto más allá, quería aprovechar la ocasión que se me brindaba para salirme de lo tradicional, las mismas o parecidas fotografias de pareja en los mismos rincones, reportajes y sesiónes de fotos de novios que en la mayoría de las ocasiones eran muy parecidos y muy tradicionales.
Necesitaba buscar algo más, salirme de esas fotografías tan repetidas en mi inconsciente y gracias a Ruben y Liz una pareja repleta de amor, de cariño, de ilusión y ganas tuve la oportunidad de mimetizarme con el entorno, con el follaje tan espectacular del paraje, ocre y rico en matices y sobre todo intentando interpretar y leer esa luz tan sobresaliente y mágica que se colaba entre aquellos árboles centenarios esa época del año.
Sin más pretensión que recordar esa fantástica tarde que pasé junto a Ruben y Liz y mostraros otra forma de ver este lugar, os dejo con una breve pincelada de la sesión de fotos preboda.
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