Fotografo de Bodas en Murcia: Reportaje de Boda en Murcia: Carlos y Maria.
Como fotógrafo profesional de bodas es increíble y maravilloso conocer y entrar en la vida de personas como Carlos y María, ese tipo de parejas con las cuales a las primeras de cambio parece que hay un «flechazo» o un «nexo de unión» muy especial y diferente en la primera mirada, en las primeras palabras que se intercambian en la primera cita.
Esto provoca que desde el principio una relación de servicio laboral se convierta en algo más personal, más sincero y cercano. Este tipo de relaciones provoca interiormente en mi una alegría y un sentimiento especial hacia la pareja porque los siento y percibo como unos amigos realmente y de esta manera la relación fluye natural y real.
Así fué el reportaje de fotos preboda de Carlos y Maria, algo muy especial y no una sesión de fotos sin más y de la misma manera así transcurrió el inolvidable e intenso día de su boda.
Desde primera hora de la mañana en casa de Carlos donde su hermano y padres le ayudaban a vestirse y hacer de esos momentos algo especial, aunque a decir verdad Carlos no estaba especialmente nervioso.
Sin más dilación nos fuímos pitando a casa de María donde las cosas fueron completamente diferentes. María es la mayor de los hermanos de una familia numerosa y además un buen número de amigas esperaban impaciente el momento de ver a María vestida con su precioso traje de novia.
Por momentos parecía que nos faltaba tiempo por todos lados, entre el vestido, regalos, besos y abrazos, detalles, etc, etc, sin duda que son momentos especialmente emocionantes y que siento que vivirlos tan cerca y de primera mano me hacen sentirme un verdadero privilegiado.
La ceremonia en La Iglesia Parroquial de San Francisco fué especialmente emotiva y diferente por tratarse de familias que viven tienen una profunda convicción religiosa y lo viven muy intensamente. Esto provocó un buen número de momentos diferentes, de gestos, miradas, de rituales que realmente fueron muy bonitos, entrañables y personales.
Pero si en algo se caracterizan las bodas de mañana es que llega un momento que el horario no da más de si y apenas tuvimos 5 min. de reloj para hacer alguna foto de exteriores camino al restaurante donde los invitados esperaban la llegada de los recién casados Carlos y María tomando un coctel de bienvenida.
El restaurante se encontraba totalmente lleno, creo recordar que sobre los 500 invitados, lo cual también nos da una idea de la cantidad de momentos importantes que se pudieron producir en el transcurso del refresco; regalos de invitados, regalos de familiares, regalos a padres, a hermanos, a abuelas y abuelos, a amigos más cercanos y personales de los novios, risas, lágrimas, emoción, alegría, cantos, bailes preparados, etc, etc, sin lugar a dudas que fué una boda especialmente bonita, familiar, alegre y a la vez entrañable.
Posteriormente a la comida los novios tenían un baile especialmente preparado para la ocasión que nos dejó a todos los asistentes con la boca abierta, fué muy bonito y extremadamente conseguido, se nota la dedicación, tiempo, mimo y cariño que Carlos y María le han echado para dejar atónitos a sus invitados.
Las copas, el baile y la fiesta, con tantos invitados, familiares y grupos de amigos jóvenes y con ganas de marcha continuó hasta bien entrada la madrugada y de veras que se produjeron momentos y situaciones especialmente divertidas, alegres y en un tono muy festivo y de gran algarabía en general.
No quiero extenderme con más palabras porque en definitiva en esta historia lo que verdaderamente cuenta y habla por si mismas son esta selección de fotografías de boda que desde un punto de vista personal he considerado que contaban la historia tan bonita de aquel día desde el principio hasta el final.
Espero que la selección sea de vuestro agrado.
Sólo me queda desde aquí dar las gracias a Carlos y María por la confianza que desde el primer momento mostraron en mi persona. Espero, de corazón, haber estado a la altura de la expectativas.
Compartir en